Anoche, en el Teatro Arriaga de Bilbao se celebró la inauguración de la 64 edición de ZINEBI, Festival Internacional de Cine Documental y Cortometraje de Bilbao organizado por el Ayuntamiento de Bilbao.
A las siete y cuarto llegaba el alcalde, Juan Mari Aburto, acompañado de varios ediles y de la directora del festival, Vanesa Fernández.
En el photocall instalado en el hall del teatro posaron las autoridades con los protagonistas de la noche: algunos directores de cine, además de actores y actrices.
Además de los protagonistas, fuimos unos cuantos los que no nos resistimos a tener una foto para el recuerdo de esta gala ZINEBI 2022
En esta edición se podrán ver 147 películas realizadas en 47 países. Entre todas ellas destacan tres largometrajes y tres cortometrajes producidos en Ucrania tras la invasión, que se incluyen en una sección que han bautizado “Una vez fui cineasta. Ahora soy soldado”. Otra de las novedades de este año es que más de la mitad de los trabajos que se van a proyectar han sido dirigidos por mujeres y la mayoría cuentan con subtítulos en euskera.
La gala inaugural la dirigieron Maria Goirizelaia y Ane Pikaza y, como suele ser habitual en ZINEBI, las sorpresas llegan de la mano de jóvenes artistas que, en el escenario, interpretan música, cantan o nos hacen reír.
El concejal de Cultura, Gonzalo Olabarria entregó el Mikeldi de Honor a la cineasta polaca Agnieszka Holland, quien manifestó que se sentía muy feliz por el premio y por visitar Euskadi, ya que era uno de sus lugares favoritos de Europa.
El otro Mikeldi de Honor fue para el recientemente desaparecido director Iñigo Salaberria, recogido por un emocionado familiar, que agradeció este homenaje mientras el público le brindó una gran ovación.
Tras la gala se proyectaron varios cortometrajes.
Os dejo fotos de ANDONI RENTERIA y un enlace a la página de ZINEBI donde podréis ver toda la programación.
En la década de los años veinte del siglo pasado, la sociedad bilbaína con la colaboración institucional y el esfuerzo e ilusión de muchos músicos y músicas, fue quien impulsó la creación de esta orquesta, que ya ha cumplido cien años el pasado marzo. En aquella época, conocida como los “felices años 20”, se produjo una revolución cultural y artística no solo en Bilbao y en Bizkaia, sino en todo el mundo occidental, en general.
En el nacimiento de la orquesta tuvieron un papel fundamental tres hombres a los que llamaban “los apóstoles de la música” por su papel activo y por su capacidad de promover proyectos artísticos en Bilbao: Javier Arisqueta, Lope Alaña y Juan Carlos Gortázar. El primer concierto que ofreció la Orquesta Sinfónica de Bilbao fue el ocho de marzo de 1922 en el Teatro Arriaga, bajo la batuta de Armand Marsick.
(Imagen de la propia web de la orquesta)
La Orquesta Sinfónica de Bilbao nació tras la Sociedad Coral de Bilbao y la Sociedad Filarmónica, cuando la Diputación de Bizkaia fundó el Conservatorio de Música de Bilbao siendo Armand Marsick el director. Desde entonces muchos han sido los que se han puesto a los mandos de esta nave musical como: Vladimir Golschmann, Jesús Arámbarri, José Limantour, Antoine de Babier, Rafael Frühbeck de Burgos, Alberto Bolet, Pedro Pirfano, Urbano Ruiz Laorden, Theo Alcántara Juanjo Mena, Günter Neuhold y, desde el año 2015, Erik Nielsen.
San Petersburgo, Nantes, Marsella, Osaka y Tokio son algunos de los lugares donde la orquesta ha actuado cosechando numerosos éxitos y, por supuesto, en muchas ciudades españolas, donde se la denominaba “La orquesta del Norte”. Como dato curioso, en el año 1998 representó a Euskadi en la Exposición Universal de Lisboa. Además, ha actuado acompañando a grandes voces internacionales como: Victoria de los Angeles, Montserrat Caballé, Alfredo Kraus, Plácido Domingo, Luciano Pavarotti o Ainhoa Arteta, entre otros.
A todas sus actuaciones y grandes éxitos hay que añadir la labor pedagógica que desarrolla ofreciendo conciertos didácticos desde hace más de tres décadas y organizando actividades dedicadas a la familia y a la inclusión social, por lo que se la considera pionera en este aspecto. Además, colabora con otras instituciones culturales de la villa de Bilbao como el Teatro Arriaga, el Museo de Bellas Artes o el Museo Guggenheim.
Las aportaciones de sus patronos: Diputación Foral de Bizkaia y el Ayuntamiento de Bilbao, así como el apoyo de sus innumerables aficionados que acuden a sus conciertos, son el sustento de la orquesta que se gestiona, sin ánimo de lucro, a través de la Fundación Juan Crisóstomo de Arriaga-Orquesta Sinfónica de Bilbao/Juan Crisóstomo de Arriaga-Bilbao Orkestra Sinfonikoa Fundazioa.
La creación del Palacio Euskalduna fue un acontecimiento importante para la orquesta donde ha situado su sede y donde han mejorado las condiciones tanto para los espectadores como para los músicos.
Para conmemorar sus cien años de fundación, el 17 de marzo de este año 2022, se inauguró una exposición itinerante que recorrerá varios pueblos de Bizkaia, donde se cuenta la historia de la BOS en doce paneles de gran formato con texto y fotografías. Asimismo, el alcalde de la villa de Bilbao, Juan Mari Aburto y la Diputada de Cultura, Lorea Bilbao descubrieron una placa conmemorativa en el hall del Teatro Arriaga, que recuerda aquel primer concierto ofrecido en este teatro municipal, con el que la orquesta se mostró en sociedad. Desde entonces, ha ofrecido más de 4700 conciertos.
Durante todo este año están previstos más actos para celebrar el aniversario de la orquesta, como un mural del artista de arte urbano, Pablo Astrain, situado en la entrada del barrio de Olabeaga y que, en el momento de publicar este post, todavía no ha sido inaugurado.
PD El texto es mío (como siempre) y la información la he recogido de la propia web de la orquesta. https://bilbaorkestra.eus
Todas las fotos, excepto la antigua, son de Andoni Renteria.