MARI JAIA SE DESPIDE

Me voy.

Un año más me despido de todos los bilbaínos y visitantes que me habéis hecho sentir la reina de la ASTE NAGUSIA 2017.
Si, ya sé que dicen que soy la protagonista principal de estas fiestas, pero no. No es cierto.
Los únicos protagonistas sois vosotros; los que el día del txupin esperáis a verme en el balcón del Teatro Arriaga para anudaros el pañuelo al cuello y darme la bienvenida cantando mi canción; los que cada mañana acudís al pasacalles de los Gigantes y Cabezudos; los que, con dedicación, preparáis deliciosos platos para los concursos gastronómicos del Arenal; los que bailáis a todas horas al son de un txistu; los que subís a las barracas a disfrutar de las coloristas y ruidosas atracciones; los que hacéis turnos en las txoznas sin sentir cansancio; los que lleváis a vuestros niños en el tren Txu-txu hasta el parque de Doña Casilda; los que acudís a ver con emoción los fuegos artificiales cada noche; los que amáis los conciertos nocturnos y los espectáculos callejeros diurnos; los que respetáis las normas; los que sois tolerantes con los demás… Todos vosotros sois los protagonistas de estos trepidantes nueve días.

21175130_1419739984800811_207341256_n
Esta noche, como cada agosto desde hace treinta y nueve años, en las orillas de la ría permaneceréis expectantes, tristes, cansados… observando cómo me colocan en una embarcación donde me darán fuego. Si, fuego. Pero no sufriré, no me voy triste, sé que os he hecho sentir bien durante estos días, sé que guardáis fotos conmigo en las que se os ve sonrientes y eso me hace feliz, sé que el año que viene estaréis nuevamente esperando a que salga al balcón, sé que me queréis.
Para terminar solo puedo daros las gracias por el cariño y fidelidad que siempre me demostráis.
MILA ESKER ETA URRENGO URTERA ARTE!
MARI JAIA.

TXUPIN 2017

Como cada año el Txupin marca el comienzo de la semana más larga en Bilbao: nuestra ASTE NAGUSIA.
Durante nueve días Bilbao se convierte en una fiesta de color, luz, música, bailes, deportes rurales, concursos varios, txoznas, teatro… y muchos espectáculos más.
Ayer, sábado, a las seis de la tarde en el hall del Teatro Arriaga nos congregábamos más de cuatrocientas personas para recibir a la protagonista de las fiestas, a Mari Jaia; mientras, en el exterior, comenzaba a reunirse mucha gente que no querían perderse el Txupin.

DSC_2414

Incluso, Juan Crisóstomo Arriaga, lucía festivo.

DSC_2558
El Alcalde, Juan Mari Aburto, acompañado de la Corporación Municipal al completo presenciaron el aurresku de honor después de mantener un respetuoso minuto de silencio por los atentados de Cataluña.

DSC_2442

DSC_2447
Minutos después nos encaminamos todos al piso de arriba para proceder a la presentación de Nati Ovelleiro, como pregonera y Ane Ortiz como txupinera.
Ellas estaban emocionadas, felices, muy sonrientes y con mucha responsabilidad, ya que faltaba menos de una hora para que salieran al balcón del teatro y, frente a miles de bilbaínos, pronunciara el pregón una y encendiera el txupin la otra, marcando, así el inicio de estas fiestas tan esperadas por todos.

DSC_2462
Dentro del edificio el calor era sofocado con unos abanicos de cartón con el logotipo y el color rojo de nuestra villa.
Camareros uniformados desfilaban con bandejas de refrescos, cerveza y cava para saciar la sed de los que allí nos encontrábamos.
El denominador común era la risa, el buen humor, la charla, los abrazos y besos. Todos estábamos pletóricos, sabiendo que Mari Jaia nos trae a Bilbao la posibilidad de evadirnos de nuestra rutina y sumergirnos en unas fiestas que, el próximo año, cumplirán cuarenta años tal y como las conocemos hoy en día.
El alcalde y la concejala de fiestas, Itziar Urtasun se colocaron los pañuelos de fiestas, haciendo lo propio con las dos protagonistas del momento. También a los asistentes nos entregaron uno con el dibujo de nuestra querida baldosa.

DSC_2473DSC_2476
A las siete en punto, Nati y Ane o lo que es lo mismo, la pregonera y la txupinera junto con la persona que realizaba la traducción en el lenguaje de signos, salieron al balcón. Abajo, en la plaza, la multitud les recibió con mucho entusiasmo y gritos de ánimo.
Unos minutos más tarde la canción de Kepa Junquera en honor a Mari Jaia sonaba en los altavoces y miles de personas tanto fuera como dentro la cantábamos al unísono.
Este acto, además, nos da la oportunidad a todos los asistentes de saludarnos y compartir un momento emotivo.
El alcalde se fotografió amablemente con todo aquel que se lo solicitó.

DSC_2522
Olga Zulueta y yo no dejamos escapar la posibilidad de besar a Isidro Elezgarai.

DSC_2530
Jon Aldeiturriaga me hizo el honor de anudarme el pañuelo al cuello.

DSC_2499
Los padres y hermana de la txupinera, posaron felices con Beatriz Marcos y conmigo.

DSC_2483
Aitor Bilbao, siempre atento, posó muy sonriente para la cámara de Andoni.

DSC_2527
Txoron, tan elegante como nos tiene acostumbrados.

DSC_2504
Karmele Larrinaga es tan simpática como buena actriz.

DSC_2535
Oscar del Hoyo y yo bajamos la escalinata del Arriaga mientras Andoni nos tomaba esta foto.

DSC_2542

Mi amigo Javier es encantador.

DSC_2509

Kepa Gallego y su amigo Javier Ortuzar tampoco quisieron perderse el txupin.

DSC_2496
Marino Montero, uno de los ideólogos de nuestra ASTE NAGUSIA.

DSC_2533
El alcalde, Beatriz Marcos, Olga Zulueta y yo con Mari Jaia.

DSC_2547
Anakoz Merikaetxebarria siempre con planes y proyectos.

DSC_2537
José Mari Amantes y Luis Castresana preparados para una semana trepidante.

DSC_2508
Gotzone Zaldunbide, Koldo Narbaiza, Asier Abaunza y Oihane Agirregoitia disfrutaron de la fiesta.

Alberto Ruiz de Azua con su buen humor habitual.

DSC_2505
Beatriz Marcos, los hermanos Manu y Susana González y yo mantuvimos una entretenida charla.

DSC_2555
Olga Zulueta, Beatriz Marcos y Jon Ruiz tomaban cerveza La Salve para celebrar la llegada de Mari Jaia.

DSC_2543
A las ocho de la tarde el teatro quedó vacío cuando Mari Jaia fue llevada por diferentes miembros de las Konpartsak, a inaugurar las txoznas.
ASTE NAGUSIA 2017 había arrancado en buena sintonía.
Para terminar esta crónica solo me queda agradecer a todos los amigos que me dedicaron unos minutos con sus sonrisas y su cariño.
GORA ASTE NAGUSIA!
GORA MARI JAIA!
FOTOS: ANDONI RENTERIA.

AQUELLAS FIESTAS DE BILBAO

Hace cuarenta años las fiestas de Bilbao, distaban mucho de parecerse a la actual ASTE NAGUSIA.
Por supuesto, no faltaban las representaciones teatrales, las regatas en nuestra ría, los txistularis poniendo la nota musical, los fuegos artificiales dando color a nuestro cielo, los tradicionales bailes de las romerías y, cómo no, los gigantes y cabezudos.
En el año 1962 estos seres que, tan bien conocemos incluso por su nombre, reaparecieron por iniciativa del entonces director de Radio Bilbao Eduardo Ruiz de Velasco.
Estos personajes llegaban a las fiestas en sustitución de los que ya existían desde 1934 que también fueron obsequio de la emisora.
El lugar elegido para su estreno fue el Ayuntamiento; concretamente frente a la escalinata, en un soleado domingo 19 de agosto.

1896 3.png
Allí, el alcalde, pronunció unas palabras de agradecimiento y dio paso al colorista pasacalles por la villa.
Para los portadores de estos recién estrenados bilbaínos supuso un enorme esfuerzo, ya que pesaban mucho y resultaba muy costoso bailarlos, tanto que dos de los gigantes se quebraron: Doña Tomasa y el Inglés.
Quien gozó de mucho éxito aquel día fue el inigualable Gargantua que, también, se estrenaba.
Además de estos desfiles por Bilbao, había otro espectáculo que hacía las delicias de los bilbaínos, sobre todo, de los más pequeños: el Circo Atlas.
Instalado en la Campa de los ingleses, los hermanos Tonetti eran los más aplaudidos y las estrellas principales del mayor espectáculo del mundo.
Ese mismo año, pero una semana más tarde, tuvo lugar en Artxanda, un evento diferente a lo conocido hasta la fecha: la primera carrera de motocross.
Fue una exhibición de destreza y rapidez en la que participaron tanto motoristas nacionales como internacionales dejando a todos los bilbaínos asombrados.
Tampoco faltaron en aquella semana de fiestas las funciones de marionetas o las corridas de toros.
Estas actividades divertían a todos aquellos bilbaínos del siglo pasado; quizá ahora haya más oferta lúdica, pero no dudo de que entonces también eran unas fantásticas fiestas.