VESTIGIOS INDUSTRIALES EN EL MUSEO VASCO

La empresa Babckok Wilcox Española se fundó en 1918 en Galindo (Bizkaia). Casi cien años más tarde, en 2011 cesó su actividad.

Más de cinco mil trabajadores se dedicaron a la construcción de locomotoras, camiones, calderas o válvulas, además de contribuir a la construcción de conocidas infraestructuras como el puente del Ayuntamiento de Bilbao, la refinería de Petronor, un alto horno de Altos Hornos de Vizcaya o diferentes centrales nucleares.

Algunas de estas piezas, que se encontraban abandonadas en la fábrica tras su desaparición, fueron la inspiración del artista bilbaino Alberto Salcedo que ha reinterpretado unos objetos industriales en obras de arte realizadas con diferentes materiales como bronce, pasta egipcia, escayola o con una impresora en 3D.

Hoy, 13 de noviembre de 2019, se ha presentado esta exposición titulada AZKEN ALABAK haciendo referencia a las últimas hijas, es decir, piezas de la producción de la ya derruida fábrica.

 

Acompañando al artista se encontraban Lorea Bilbao, Diputada de Cultura, Euskera y Deporte; Gonzalo Olabarria, Concejal de Cultura del Ayuntamiento de Bilbao y Sorkunde Aiarza, Directora del Euskal Museoa-Museo Vasco.

 

Lorea Bilbao ha comentado que el patrimonio industrial de Bizkaia es una riqueza de primer nivel y que el artista ha rescatado la memoria industrial a través de un concienzudo trabajo de investigación.

Sorkunde Aiarza se ha mostrado feliz de que sea en este museo donde se expongan estas magníficas obras.

Por su parte, Alberto Salcedo ha agradecido a las instituciones la oportunidad que se le ofrece de dar a conocer su obra al público y ha expresado que su objetivo es luchar contra el olvido de la pasada historia industrial. También ha explicado que existe mucho trabajo de campo detrás de estas veintisiete piezas.

Ya en la sala expositiva, Alberto nos ha ido contando diversos detalles de cada pieza y nos ha mostrado la colección de fotografías que realizó en la desaparecida Babckok Wilcox y unas pantallas donde se proyectan tres videos de cuando la fábrica funcionaba y del posterior cese.

La muestra se puede ver hasta el cinco de enero de 2020.

FOTOS: ANDONI RENTERIA