El Museo Marítimo Ría de Bilbao ha preparado una de sus salas para acoger varias maquetas de barcos construidos de una manera artesanal.
El modelismo naval, que así se llama este arte, viene de lejos; concretamente del antiguo Egipto. En las tumbas de los grandes faraones se encontraron los primeros modelos de los que se tiene constancia. Ellos creían que el barco les serviría para ayudarles en su viaje al más allá.
Hoy en día son muchos los aficionados a construir pequeños barcos a escala que requiere arduas labores de investigación, grandes dosis de paciencia y mucha destreza manual.
En esta sala se pueden admirar diferentes tipos de embarcaciones. Llaman la atención los exvotos marineros, que son ofrendas que realizaban los marinos a las iglesias o ermitas en agradecimiento por haberles protegido en naufragios, temporales o ataques de enemigos.
No faltan los modelos trabajados con huesos, hilos o cabellos humanos por prisoneros durante las guerras napoleónicas.
Estas pequeñas obras de arte no son solo decorativas, sino que algunas tienen como objetivo servir como modelos para la formación de los futuros marineros de las escuelas naúticas.
El Museo Marítimo ha concebido esta muestra como una actividad más para las familias y, por ello, al entrar en la sala encontraréis un folleto con diferentes explicaciones y pruebas para realizar con los más pequeños de la casa.
En esta foto, al lado de un magnífico barco de vela, podéis verme con el director del Museo, el Sr. Jon Ruigómez.
FOTOS: ANDONI RENTERIA.