MASUSTEGI, ZONA DE MORAS.

Todos los bilbainos sabemos que Bilbao es mucho más que el centro, el Casco Viejo o la ría.
Bilbao posee una riqueza, un encanto, una historia…que se “cuelga” por las laderas de sus montes.
Hace unos días visité uno de los barrios altos conocido como el de los gallegos pero que, en el callejero, se denomina Masustegi; nombre que procede de la gran cantidad de moras (masusta en euskera) que proliferaban antes de que las casas ocuparan este espacio.


Se trata de un conjunto de casas construidas con un desorden ordenado en los años 50 y 60 del siglo pasado por aquellos hombres y mujeres, en su mayoría procedentes de Galicia, que vinieron a trabajar a la cantera (hoy ya en desuso), propiedad del empresario Miguel de la Vía fallecido en 2010 y cuyos herederos vendieron los terrenos al Ayuntamiento.


En aquellos años existía una ley que prohibía derribar una casa si ya tenía cuatro paredes y un techo, ya que se consideraba vivienda. Es por eso que los hombres erigían aquellos pequeños hogares donde luego habitarían hasta tres familias, por la noche, entre varios vecinos.
Para llegar aquí se puede coger el autobús 58 desde Atxuri o ir a pie como hice yo.
Comencé el ascenso desde el campo de fútbol Iparralde en Basurto, detrás de la que fue hasta hace unos años la estación de FEVE.


A pocos metros, en el solar que hoy ocupan unos bloques de viviendas de reciente construcción, se hallaba la fábrica de Cervezas del Norte y, un poco más arriba, la empresa Central Lechera Vizcaína.
Según me contaron, en el barrio hubo varios comercios que abastecían a todos los vecinos, incluso hubo uno especializado en productos gallegos. Hoy en día apenas quedan cuatro bares donde puedes encontrar a algunos de los vecinos que tanto lucharon para conseguir un barrio digno de ser habitado y que tantas penurias sufrieron sin agua y sin luz en sus domicilios, jugando a las cartas o tomando un vino.

Un establecimiento curioso que ya no existe fue el de alquiler de burros que facilitaba, por unas pocas pesetas, la subida a todos los que bajaban a realizar alguna gestión o a comprar.
Las calles son, en su mayoría, estrechas y con abundantes escaleras, pero las casas se mantienen en buen estado. Muchas de ellas, han sido reformadas con mucho gusto y resultan muy acogedoras, al menos desde fuera. También hay una en unas condiciones deplorables a la que han colocado, en una de sus ventanas, la silueta de un hombre con un cartel que indica que no está abandonada y que tiene dueño. Es una de las curiosidades de este singular barrio como las gallinas o las cabras que puedes encontrar en sus respectivos cercados.


Seguí avanzando y, con agrado, comprobé que el esfuerzo de subir hasta aquí merecía mucho la pena, ya que las vistas son magníficas.

Muy pocos coches se atreven a subir por estas empinadas cuestas pero, sí que vi alguno aparcado al lado de las casas.
Era la hora de volver del colegio y me encantó observar a los más pequeños cómo suben ágilmente con sus mochilas en la espalda y con un balón en la mano. Unos minutos después escuché mucha agua y me di cuenta de que procedía de una fuente con un caño muy grande por lo que el chorro salía con mucha fuerza.


De repente entre las casas apareció una placita con unos bancos y unos aparatos de gimnasia donde me detuve a tomar aire.

Existen unas fuentes que fueron también realizadas por los vecinos y que su forma recuerda a una marquesina de autobús.


Faltaban ya pocos metros para alcanzar la cima que, en este caso, era el centro social donde en ese momento celebraban el cumpleaños de uno de los vecinos más txikis y por eso lo habían decorado con globos. En la campa, muchos columpios, bancos y mesas le daban al conjunto un aspecto fantástico para disfrutar de un día primaveral.


Un edificio de dimensiones modestas y pintado de color azul es la iglesia de San Gabriel que celebra su festividad el 29 de septiembre; día en el que reparten muchos kilos de mejillones en una fiesta a la que me invitaron y, sin duda, intentaré acudir.


También aquí hay un mirador donde me dediqué a grabar un video para mis Redes Sociales y mostrar lo bonito que se ve nuestra villa desde este rincón alto. A lo lejos, el barrio Mintegitxueta o Monte Caramelo con menos casas pero muy bonito también. Esa será mi siguiente excursión.


Pensé en coger el autobús que pasaba en ese momento para volver a Basurto pero decidí que bajaría por donde había subido y admirar detenidamente este sorprendente barrio en el que te olvidas que forma parte de Bilbao y solo piensas en la tranquilidad que se respira, como así me confirmó un vecino de toda la vida.


Sin duda, os aconsejo una visita. Os sorprenderá.

FOTOS: ANDONI RENTERIA

18 comentarios en “MASUSTEGI, ZONA DE MORAS.

  1. He vivido parte de mi vida en este gran barrio de Masustegui en el Cual mis aitas siguen Viviendo, las fotos estan bien, aunque me atrevo a decirte que falta mucho material y bastante descripción… Como se hicieron las casas, lo que pasaron nuestros padres para poder tener y darnos un hogar, el colegio al que íbamos que esta al lado, hoy en día es un Cip… Y diversas cosas que se quedan en el aire.Este barrio tiene mucha historia, grande historia de gente luchadora que vino a Bilbao a buscar una vida mejor, gente trabajadora y que no solo trabajaban en la cantera, pero gracias por el esfuerzo.

    • Cualquier rincón de la villa tiene mucha historia y mil historias para contar. Si has visto más publicaciones mias verás que mi intención es contar las cosas sin hacer grandes tesis porque la mayoría de la gente lo que quiere es concisión y brevedad. Me gustó mucho el barrio y mi intención es animar a la gente a visitarlo. Gracias por tu comentario.

  2. Te faltan datos había una fábrica de soldadura y otras dos de tornería donde hoy se ubica el campo de fútbol la de soldadura estaba enfrente de lo que era la carnicería había el doble de bares y tiendas que hoy han desaparecido estaban los de blanco empezaron con una furgoneta traiendo productos de alimentación gallegos y más tarde compraron un autobús y luego otro había otro que fue el primero que hizo lo mismo más tarde lo dejaron creo que eran los segade bueno hay mucha historia perdida o que se perdera

    • Claro, seguro que me faltan datos, de todos los barrios y lugares de la villa se puede escribir muchíiiiiiiisimo más pero mi intención es que quien lea el post sienta curiosidad por visitarlo y conocer unos datos mínimos sobre el barrio. Por otro lado, también es genial que gente como tú cuente anécdotas de su barrio. Gracias.

      • Disculpame Esme pero hay cosillas q os han contado o q no habeis visto q son esenciales para apreciar este barrio. Soy joven (33) pero anectodas me han contado ni se sabe. He subido a hacer mi vida social a la zona alta y he oido a la guia y varias mentiras pero sin mas. La visita debia ir provista de fotos antiguas para mayor curiosidad e informacion. Por ultimo llamar a una casa en ruinas deporable es incorrecto puesto q los esfuerzos de la dueña por arreglarla son inmensos. Vosotros habeis visto el barrio despues de solucionar las correspondientes ITES por eso os impresiona la que esta un poquito dejada. Si hubierais asistido como yo a su crecimiento y mejora fliparias. Agradezco tu invitacion a ver el barrio pero preferimos ser un tanto desconocidos y estar en familia.
        Un saludo

  3. Mi querido barrio, el barrio de mi niñez. Mi padre fue el primero que luchó -y lo consiguió- para tener en casa «agua corriente» que decía él….
    Creo ver parte de «mi casa» (así sigo llamándole cariñosamente aunque ya no lo es), en una de las fotografías, qué ilusión!

  4. Mis padres llegaron por primera vez desde Galicia a una casa de ese barrio y siendo yo un bebé de pocos meses (hace 50 años) tuvieron que salir corriendo una noche porque se inundó.
    Nunca he vuelto, y ya no vivo en Bilbao por lo que me ha hecho mucha ilusión este reportaje. Gracias

  5. Aquí he pasado muchos domingos ya que mis padrinos y primos vivieron ahí, es un barrio pero lo primero una familia y sin olvidar al cura que el pobre falleció Don Jose .Ha cambiado mucho pero sigue teniendon su esencia

  6. Mis suegros y la que hoy es mi compañera vivieron en este barrio desde 1954 hasta 1967 con un paréntesis de 2 años que fueron a santurtzi. Vinieron de Galicia recién casados a buscarse la vida como todos los que vivían ahí. Mi mujer tomó las primeras papillas en Masustegi y aprendió las primeras letras en la escuela del barrio, También hizo la Primera Comunión en la iglesia de San Miguel, Habitaban en una de los primeros pisos empezando a subir a la izquierda que llamaban la carbonería(hoy pintada de rojo). He vuelto de visita varias veces con ella y me cuenta muchas historias. GENTE DURA Y SACRIFICADA

  7. Hola Esme,me gusta lo que has publicado,aunque te falta mucha información,me gustaría que volvieses dentro de unos meses para ver esa casa,que tenía un muñeco diciendo que no estaba abandonada,vas a flipar de lo bonita que la esta dejando mi amiga,a veces las cosas se hacen cuando se puede,yo llevo viviendo 55 años,nací ahí y siempre seguiré luchando y defendiendo mi barrio,por toda la gente que lo hizo antes,gente impresionante y de adoración, un saludo

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